American Horror Story: Hotel Capítulo 3 Análisis: “Mommy”
De momento la quinta temporada de la saga creada por Ryan Murphy está generando opiniones bastante dispares debido, en parte, a la comparación con temporadas anteriores. Sin embargo, el tercer capítulo de American Horror Story: Hotel llega para presentarnos a un nuevo personaje, el interpretado por Angela Bassett, que dará un giro a la trama que hará cambiar el rumbo de la serie.
En este nuevo episodio American Horror Story: Hotel, titulado “Mommy”, Tristan hará un pacto con March mientras la Condesa prepara un nuevo plan. Por su parte, la policía descubrirá un nuevo asesinato y el detective Lowe recibirá una mala noticia. Además, Donovan volverá a renegar de su madre pero esta vez con consecuencias que no podía imaginar… Si quieres saber al detalle lo sucedido, sigue leyendo pero ¡¡alerta spoiler!!
Discípulo
Después de haber sido transformado por la Duquesa y de descubrir el placer que le produce asesinar, Tristan acude en busca de James Patrick March del que se declara fan tras descubrir que es uno de los asesinos en serie más grande que jamás haya existido. El joven está entusiasmado de convertirse en el nuevo discípulo de March y poder usar su hotel para continuar con su legado.
Sin embargo, el nuevo propietario del hotel quiere cambiar las instalaciones por completo, cosa a la que March se niega, por lo que Tristan se ofrece para encargarse del asunto personalmente. Dicho y hecho, Tristan se presenta en la habitación de Will Drake, pero cuando está dispuesto a matarlo, la Condesa le hace señas desde lejos para que aborte la misión. ¿Qué pretende dejándole con vida si además conoce realmente todas las instalaciones del hotel?
Por fortuna para Tristan y para nosotros los espectadores que no entendemos esa actitud de la Condesa, ésta explica que le interesa mantener vivo a Will Drake por su dinero porque ella ya no es tan rica como algunos creen. Aprovechando el momento de confesión, la Condesa desvela su gran plan: Will Drake no puede morir hasta que se case con él y herede todo su dinero.
¿Paranoias?
La policía continúa con la investigación para encontrar al asesino en serio que tantos problemas les está causando. En esta ocasión les toca acudir a la redacción de un medio de prensa rosa en el que se encargan de difundir cotilleos varios y donde encuentran a todos los redactores muertos con la lengua arrancada y clavada a la mesa. Sin duda, para el detective Lowe se trata del castigo por incumplir el mandamiento “No darás falsos testimonios”.
Mientras tanto, Claudia, la editora y ayudante del dueño del hotel es asesinada por el drogadicto rubio que llegó en el primer episodio y que aparece de dentro del colchón. Al llegar al hotel el detective se encuentra al chico todo ensangrentado y pidiendo ayuda. Antes de morir confiesa que ha asesinado a una chica creyendo que era Sally porque ella le engañó y fue su culpa que ahora se encuentre así.
Al regresar al hotel Cortez, Sally le cuenta al detective que ha oído que la editora de moda, esto es, Claudia, se ha marchado, ya que cuando John llega a la habitación se encuentra con la doncella cambiando las sábanas y limpiando. Lowe le pregunta por el joven drogadicto y Sally suelta una llamativa frase “No es como si rompiéramos uno de los Diez Mandamientos”.
Después de esa declaración que rápidamente asocia con el asesino en serie al que están intentando de encontrar, Lowe arresta a Sally, que parece no poner mucho impedimento. Sin embargo, en el ascensor camino a comisaría, Sally intenta captar la atención y el perdón de John, aunque desaparece después de decirle que saben que están destinados a estar juntos, desatando la locura de Lowe, que ya duda si todo es realidad o fruto de un sueño.
Ser madre
Alex, doctora y mujer de Lowe, atiende de nuevo al niño con sarampión que esta vez ha empeorado y ha tenido que ser trasladado de urgencia al hospital. Alex no comprende que una madre descuide así a su hijo hasta el punto de permitir que su vida corra peligro. Gracias a esta historia, la doctora cuenta que Holden ha sido y siempre será su único gran amor, más incluso que a John. Por este motivo, el día que su hijo desapareció su vida se convirtió en un pozo sin fondo, tanto que se cortó las venas en un intento de suicidio, aunque John llegó a tiempo para rescatarle.
La pequeña Scarlett cuenta, con ayuda de una consejera, lo que vio en el hotel y lo que sabe de Holden, aunque su madre crea que esa historia es inventada para hacerles daño. Alex le propone el divorcio a John, él, desesperado le confiesa que está viendo cosas y se está volviendo loco. Al salir del cuarto de John, Alex se encuentra con Claudia cubierta de sangre y con su hijo Holden que le saluda.
Mientras tanto, después de haber sido desterrado por la Condesa, Donovan le dice a su madre que debería suicidarse por todo el daño que le ha hecho aunque para nosotros la mujer sólo quiere ayudarle ya que desconocemos el pasado de ambos. Los únicos detalles que tenemos nos hacen pensar que Iris siempre intentó proteger a su hijo y por eso se separó de su padre e intentó salvarle la vida tantas veces.
Cansado, Donovan Sale en busca de sangre fresca. Después de alimentarse de una joven, Donovan se encuentra con Ramona, una mujer a la que se le ha estropeado el coche y que parece una nueva víctima perfecta. Sin embargo, cuando se acerca a Ramona, la mujer le ataca por sorpresa y lo mete en el maletero del coche.
Donovan despierta rodeado de cables que le extraen la sangre para ser procesada y observado por Ramona Royale. La mujer le explica que muchos años atrás era una estrella del cine de serie b hasta que conoció a la Condesa y ésta le transformó, convirtiéndola en una vasalla más durante décadas. Pero un buen día llegó el Profeta Moisés, un rapero que comenzaba a ponerse de moda y Ramona se enamoró perdidamente de él.
Pero la Condesa no tardó en descubrir el engaño y se cargó a todo el equipo del cantante para matar después al propio Moisés delante de Ramona. Está claro que la Condesa tiene que ser la reina y no puede permitir que una de sus creaciones continúe por su propio camino. Ahora, treinta años después, Ramona quiere que Donovan le ayude desde dentro a cazar a los pequeños vampiros para vengarse de la Condesa.
Mientras tanto, Iris le pide a Sally que le ayude a morir y gracias a eso descubrimos que sigue a deambulando por el hotel porque tiene asuntos pendientes, en concreto, vengarse de Iris. Cuando la recepcionista está a punto de morir aparece su hijo Donovan arrepentido y le da de beber su propia sangre, convirtiendo a su madre en una vampiro e inmortal de por vida.